El Rosamonte Racing Team tuvo acción en Misiones.

Tras varios meses sin actividad en el mundo del motociclismo, los pilotos del argentino de velocidad Nahuel Santamaría (R3 Cup), Esequiel Gómez (Junior Cup), y Adrián Silveira, director del Rosamonte Racing Team, volvieron a entrenar en el Autódromo Rosamonte de Posadas, Misiones. Bajo estrictas medidas de seguridad establecidas por el gobierno de la ciudad y controladas por las autoridades deportivas, con equipo técnico reducido, las motos retomaron la velocidad en la pista. 

Los pilotos sostuvieron que lo más difícil de volver es «la confianza con la moto, ver dónde va y qué hace y su comportamiento. Es retomar sintonía más que nada», expresó el joven oriundo de Apóstoles, Esequiel Gómez. 

Santamaría, que se movilizó desde Leandro N. Alem para la jornada de entrenamiento, analizó su rendimiento: «tuve que corregir algunas cosas, el freno, pero ya lo solucionamos y estamos en los tiempos».

Por su parte, Adrián Silveira se mostró muy contento con la posibilidad de acelerar nuevamente y se refirió el momento que atraviesa el motociclismo por el parate. «La verdad es que está difícil, en un momento habían muchas ilusiones y ganas de hacer el Superbike Argentino, por parte del organizador y los pilotos», sostuvo Silveira. Además profundizó que «la verdad es que hay que priorizar la salud, es lo más importante, así que dependeremos de cómo avance la pandemia para poder soñar con un campeonato exprés a fin de año». Cabe recordar que Luciano Ribodino, piloto de Superbike, también integra el equipo de pilotos pero se encuentra realizando los entrenamientos en Josefina, a 10 km de San Francisco, Córdoba, su ciudad natal.