Córdoba desborda de paisajes para visitar, arroyos donde refrescarse, rutas para desandar…pero por lo menos lo que me faltaba a mí era un lugar donde parar, o sea, un parador. Eso sería como la cereza del postre, ¿no?
Alguna vez soñé en tener un lugar donde llegaran visitantes en moto a calmar su sed o saciar su hambre, un lugar de paso donde descansar un rato y seguir después. Parece que no fui el único, Isabel y Martín también tuvieron ese sueño con la gran diferencia en que lo hicieron realidad.
Y así nació Macoco, un parador en Valle Hermoso justo en la subida al Camino del Cuadrado. Un parador muy bien decorado al estilo vintage. Pero qué mejor que lo cuenten mejor los dueños: