Y llegó el gran día. Culminó la 8º Etapa y con ella, el South American Rally Race. Fueron ocho capítulos de competencia extrema en el rally raid sudamericano. Del centenar de participantes que aceptaron el desafía, solo 60 traspasaron la meta final.
En la jornada de hoy, solo restaba transitarla teniendo en cuenta lo que ha significado los más de 3.000 kilómetros de esta segunda edición. Sin embargo hubo golpe de escena cuando Zingoni-Acosta (T3.1), se quedaron fuera de la lucha que llevaban adelante con Luppi-Justos (T3.1). Y cada vez se afianza más la frase de “la carrera termina cuando se cruza la meta”. Desde el arranque y hasta el último kilómetro, este SARR mostró los dientes. Adjetivos como duro, exigente, extenso y sacrificado; eran de conocimiento de todos los participantes cuando comenzó este sueño allá por el 17 de febrero pasado. El triunfo es para todos aquellos que finalizaron, que por cierto no es poca cosa. El nivel jerárquico de sus participantes, mostró al planeta motor que en Sud América hay potencial. Y se juntaron en la República Argentina para cumplir 8 capítulos por distintas geografías que ofrece éste País.
Alberto “Puchi” Ontiveros (M1) penó en el comienzo con un error, y promediando la 2º mitad con una fortísima caída. Pero siempre fue detrás del escalón más alto del Podio. Y lo alcanzó. Diego Roldán (M2) resistió hasta el final, a pesar de extralimitarse físicamente, El gasto le alcanzó para ser el mejor entre los M2. Andrés Frini (Q1) le tocó distintas situaciones por llevar adelante. Entre ellas, resignarse de no poder ayudar a otro competidos y amigo con sus problemas mecánicos. Sin embargo, alentado por éste, continuó hasta el final para ganar este SARR2021. Julio Estanguet se quedó con la Q2, objetivo que trajo para repetir lo hecho el año pasado.
Hasta aquí la historia del SARR2021 dice que ya es un clásico de este lado del planeta. Hasta aquí un centenar de participantes de distintos países grabaron su nombre jerarquizando esta carrera. Hasta aquí llegó esta 2º Edición del South American Rally Race
Marcelo Ottoinello, periodista especializado refernte nacional en del motociclismo local que está actualkmente residiebndo en ese país centroamericano, nos manda esta novedad muy buena.
El Caribe es una de las regiones turísticas más atractivas del mundo. Si a eso le sumamos un lugar para explotar en su más alta expresión el deporte motor, sin dudas que las mejores disciplinas del auto y la moto, así como el público, se van a dar cita.
Dentro de la región, República Dominicana es uno de sus países más importantes. Allí se construirá un trazado para tal fin, el cual se levantará entre 2026 y 2028 y cumplirá con los más altos estándares de seguridad, habitabilidad, servicios que proponen la FIA (Federación Internacional del Automóvil) y la FIM (Federación Internacional de Motociclismo), merced al aporte económico de un grupo inversor multinacional.
Desde luego, el trabajo para levantar este coloso correrá por cuenta de los diseñadores más especializados del plano internacional y de expertos en las restantes áreas de desarrollo de labores.
Acerca de la pista, combinará curvas con diferentes dificultades técnicas y velocidades, además de rectas largas para desarrollar el potencial de cada vehículo, sobre todo en lo referido a aceleración y velocidad máxima o velocidad punta.
Su estructura edilicia, de corte netamente futurista, se enfocará en el uso de materiales ecológicos y energía renovable, dejando una huella ambiental mínima. Entretanto, contará con una capacidad de espectadores similar a la de los más prestigiosos escenarios del mundo, empezando por los 50.000 asientos. Se sumarán, por supuesto, espacios VIP y zonas exclusivas para los aficionados. A su vez, la polifuncionalidad de sus instalaciones permitirá llevar adelante espectáculos culturales, conciertos, ferias, salones, presentaciones y convenciones entre otras actividades.
Como se puede entender, la obra estará en el grupo de las de élite de su tipo en el mundo por la ingeniería que albergará, al mismo tiempo que será un propulsor importante para la economía dominicana, generando más empleos en la construcción y en las distintas áreas que compondrán el complejo, así como también en las cuestiones que implican al quehacer cotidiano, especialmente en el turismo.
La República Dominicana tiene todos los requisitos para sumar su cuota de participación en las diferentes manifestaciones más exigentes del automovilismo y el motociclismo deportivo, siendo los dos objetivos principales de este nuevo proyecto contar con las respectivas fechas de la Fórmula 1 y del Campeonato Mundial de Motociclismo de Velocidad, popularmente conocido desde hace unos años como MotoGP. Claro que también están en carpeta otras categorías de ambas prácticas. Algunas de ellas son el Campeonato Mundial de Resistencia (WEC), el Campeonato Mundial de Superbike (WSBK) y la IndyCar Series.
Con ello y el turismo, la ecuación será más que lógica y el país gozará de un prestigio muy elevado a nivel global debido a su ubicación geográfica y los servicios que ofrecerá, sin dejar de lado la atención que pondrán las categorías que habitualmente captan el mayor interés, los fabricantes y los simpatizantes con miras a visitar este complejo deportivo de altísimo calibre en todas las áreas que lo conformarán.
Un sueño dominicano está en marcha.