Con el regreso ya confirmado del campeonato AMA Supercross el 31 de mayo en Salt Lake City, Utah, Feld Entertainment, la productora organizadora del certamen, empezó a trabajar en un plan sanitario antiCOVID-19 con todas las reglas de seguridad y salud para implementar en las 7 fechas que restan por disputar, el cual se entregará en las próximas horas a los equipos, y del que Dave Prater, director principal de operaciones de la empresa, dio detalles de las medidas a la prensa.
El campeonato será sin público y habrá un total de 900 personas como máximo por evento. Todos aquellos que lleguen a Utah (equipos y pilotos) desde otro lugar que no sea del propio estado se les pedirá que se realicen un test COVID-19 y, de dar negativo, se los declarará libre de coronavirus 48 horas antes de cada carrera, lo cual habilitará a los pilotos para correr. Esta prueba no volverá a ser obligatoria siempre y cuando las personas del evento no abandonen el estado. En caso de que esto sí suceda, se les volverá a pedir un nuevo test 48 horas antes a la carrera y, además, los organizadores impondrán controles de temperaturas en el Estadio. Teniendo en cuenta el poco tiempo entre fecha y fecha (de domingos a miércoles) es posible que los equipos permanezcan en Utah hasta el final del campeonato, según explicó en su portal Racer X.
Para los casos de COVID-19 positivo, se lo excluirá de la carrera y se les requerirá una cuarentena de 14 días. Si la temperatura decrece, a las 72 horas se les volverá a hacer un nuevo test. No habrá hoteles oficiales de cuarentena para el campeonato, pero todos los participantes deberán informar a la organización una dirección de hospedaje. También se informó que los equipos deberán designar grupos de máximo 10 personas para contactos entre sí, y si esta cantidad asciende, se separarán los miembros en grupos de diez o menos integrantes.
Fuente: Racer X.